Ezequiel 34-36

En nuestra lectura de hoy, lee los capítulos 34 al 36 de Ezequiel.
El atalaya levantaba su voz solo cuando algo se acercaba, pero los pastores alimentaban y cuidaban al pueblo dia tras día. Y esto no lo estaban llevando a cabo los líderes del pueblo.
Y Dios les muestra que conoce los detalles del fracaso en los líderes, de su irresponsabilidad y su egoísmo. Pero Dios les dice: yo lo haré, yo restauraré, yo levantaré a las ovejas lastimadas.
Es maravilloso ver cómo Dios tiene cuidado de su pueblo. Siempre habrá malos obreros pero Dios tiene cuidado de su iglesia. En el Nuevo Testamento, Pablo advierte que en la iglesia se levantarán hombres que hablan cosas perversas, lobos rapaces, que salen de entre los hermanos para arrastrar tras de sí a los discípulos.
Jesús es nuestro buen pastor, el príncipe de los pastores, necesitamos aprender a oír su voz y seguirle.
Dios desea restaurar y quiere transformar nuestras vidas en lo profundo, por eso el dice:
 “Les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. Les quitaré ese terco corazón de piedra y les daré un corazón tierno y receptivo. Pondré mi Espíritu en ustedes para que sigan mis decretos y se aseguren de obedecer mis ordenanzas.”
‭‭Ezequiel‬ ‭36:26-27‬ ‭NTV‬‬
Un corazón nuevo es lo que necesitamos. Deja que Él te lo de hoy.